Entrega 40ª: Un susto sin importancia

En su visita al cortijo, Luis no puede dejar de recordar momentos compartidos con Esperanza en aquellos parajes, hasta el punto de que su doble se le subleva: Pero ¿no quedamos anoche, abrazados a la almohada, que había un montón de tías más, que no nos gustaba su nueva forma de ser y que no íbamos a invertir ni un minuto más en pensar en ella? ¿A qué coño darle tantas vueltas?

Ya por la tarde sufrirá un pequeño percance con una de las vaquillas bravas que será motivo de inquietud por parte de Esperanza, cuando Ginés les llega con la noticia.

Nota: Aprovechando que cumplimos un año desde la publicación de la novela, he hecho un pequeño cambio tendente a facilitar la lectura a aquellas personas que siguen la novela a través del blog. A partir de ahora, en el apartado "¿Te apetece leerla?" aparecerá tan solo la última entrega que se haya publicado. Las anteriores publicadas se encuentran en la pestaña del mismo nombre, ordenadas en orden creciente.